Ávila se sube al 'buque' de los congresos

Poco a poco el Palacio de Congresos Lienzo Norte va adquiriendo su impronta definitiva antes de abrir en breve sus puertas. Elegido su gerente, el edificio ya se promociona por España y sus ferias especializadas con el fin de captar congresos. Sin embargo poco a poco los abulenses van descubriendo en el edificio un nuevo pegote en la ciudad.
Después del edificio de Moneo en la Plaza de El Grande, las murallas abulenses vuelven a sufrir un nuevo ataque de celos de los arquitectos actuales. El proyecto del navarro Francisco Mangado, aunque de reconocido prestigio, vuelve a dejar en entredicho las decisiones urbanísticas de la ciudad. Y es que una de las vistas más emblemáticas de la ciudad, como es la del lienzo norte de la muralla desde los Cuatro Postes han quedado mutiladas para siempre con el nuevo edificio. Sus dimensiones y ubicación compiten con la impronta de la muralla, que ve como su importancia disminuye al tiempo que aumenta el presupuesto para este tipo de proyectos de los megalómanos dirigentes populares.
Cierto es que el edificio puede ser un ejemplo de funcionalidad y arquitectura moderna pero la ubicación, como en el caso de Moneo, no es la más idónea. ¿Por qué se empeñan en hacer estos edificios junto a la muralla? El Partido Popular, como no podía ser de otra manera, se escuda en el hecho de que el proyecto estuvo expuesto a exposición pública (¡Ah, Santa Rita, Rita, lo que se da...!) pero el resultado varios años después no se lo imaginaba nadie. El 'buque' como ha sido bautizado se ha convertido en la nueva silueta de una ciudad que apenas guarda ya una pizca de esencia para ser merecedora del título Ciudad Patrimonio de la Humanidad.

Comentarios